Una vez al mes me meto a Facebook a ver si me ha desbloqueado mi ex.
No lo ha hecho.
Vale.
Pero después siempre me sale un tío de 40 años haciendo bromas con el reggaetón: «¿Os gusta la música o el reggaetón?» «Firma aquí si quieres prohibir el reggaetón por ley».
Lleva así 15 años. Y como él, prácticamente todos los engranajes del humor. «Los auriculares te advierten del peligro si te pones el volumen alto pero no si escuchas reggaetón». 14.000 likes. 14.000 lectores siguen 14.000 años después dándose crédito intelectual con el concepto más trillado de la historia. Una legión de autómatas echando gasolina (a ella le gusta) al mismo recurso, distrayendo lo esencial: ¿por qué cojones sigue existiendo el reggae?
Música pegajosa, minusválida, que da calor y algo muchísimo peor: buen rollo.
