[mkdf_dropcaps type=»normal» color=»#ff3154″ background_color=»»]L[/mkdf_dropcaps]a Policía Nacional arrestó la pasada semana a Abdel Bary, uno de los miembros de DAESH más buscados en Europa. Figuraba en la lista de los Foreign Terrorist Fighters y fue detenido la pasada semana en una operación conjunta entre la Policía Nacional, el CNI e instancias internacionales para la lucha contra el terrorismo.
Según informó la Policía Nacional, Bary, de nacionalidad egipcia, se encontraba en una vivienda de Almería junto a otros dos detenidos tras haber ingresado en España de forma irregular. Se le conoce por haber sido parte de las filas de Estado Islámico en el frente de Siria-Irak. Posee un perfil criminal extremadamente peligroso y unos rasgos de personalidad muy concretos. Esto puso en jaque a las agencias de inteligencia internacionales, ante la necesidad de capturarle antes de que consiguiera disipar su rastro.
Parte de su trayectoria en el DAESH ha quedado registrada en una serie de documentos escritos y audiovisuales publicados por el propio grupo terrorista, mostrando diferentes aspectos de su actividad en la organización y crudas imágenes de sus crímenes en la zona de conflicto.
La investigación sobre Bary se lleva desarrollando varios meses, siguiendo la pista de su precavido viaje por el norte de África, su entrada en España y los movimientos que realizaron una vez en Almería. Los detenidos aprovecharon la compleja situación del COVID-19 en su favor, realizando pocas salidas al exterior, por separado y siempre con mascarillas para no ser reconocidos.
Por el momento, la operación continúa abierta con el objetivo de verificar la identidad de los dos detenidos que se encontraban junto a Bary. Además, los agentes involucrados también tratan de averiguar las razones de su presencia en España y si también son combatientes retornados o si, por el contrario, forman parte de una red de apoyo logístico y de seguridad para la entrada de estos en Europa.