Imagínate esto: estás conduciendo tranquilamente por una carretera comarcal, disfrutando de la brisa y la música en la radio entre las curvas y la velocidad, y ¡boom! Alguien decide brindarte un servicio no solicitado (o quizás sí) mientras estás al volante.
Sí, amigos, esta es la historia de un conductor que tuvo la audacia de recibir un «regalo» oral en plena carretera. Pero, ojo, no fue precisamente el mejor momento para recibir tal regalo porque, para su sorpresa, ¡le costó 500 euros y seis puntos del carnet! ¡Ouch!
Los agentes que reportaron la infracción cuentan que el conductor circulaba “con el pantalón y el calzoncillo bajado y el pene erecto”, mientras su acompañante iba “con la cabeza en las piernas del conductor”. No sabemos cómo se producirían los hechos, pero de lo que no cabe duda es de que le ha costado cara la broma al conductor.
Ya hemos comprobado que las distracciones al volante son peligrosas, pero ¡esto lleva el concepto de «conducción distraída» a otro nivel! Así que, recuerda, si quieres sexo oral, ¡aparca primero!